Cuando se trata de planificar tu experiencia en el extranjero, es esencial encontrar el lugar adecuado para vivir. El alojamiento que elijás no solamente tomará gran parte de tu presupuesto de viaje, también influenciará tu experiencia universitaria. Aquí te presentamos cinco opciones de viviendas estudiantiles, para ayudarte a elegir la que más se adapte a tus necesidades.
1. Piso compartido
Vivir con otras personas en un espacio compartido tiene muchas ventajas: entre ellas distribuir los costos de vida y tener tu propia habitación en la privacidad y comodidad de un departamento. También es una buena manera de conocer gente nueva e incluso hacer amistades duraderas.
Aunque compartir un piso puede ahorrarte dinero, encontrar el adecuado lleva tiempo. A menudo pasarás por una breve ronda de entrevistas para asegurar de que seas el candidato adecuado para el grupo de personas (o persona) con las que vas a vivir. También requerirán un ingreso o que indiques cómo planeas pagar el alquiler mientras estudias. Donde esté disponible*, podés pagar tus cuentas en línea a través de WU.com o desde tu celular usando la app the Western Union® y ser el compañero de piso favorito de todos. Tu familia en el exterior también puede ayudarte a pagar la renta enviando dinero para cobro en efectivo a un local de Western Union.
2. Residencias universitarias
Si lo que querés es tener una experiencia de estudiante real, o si aún no estás listo para asumir los gastos y responsabilidades que vienen con un departamento, vivir en una residencia universitaria es una buena manera de empezar tu aventura estudiantil en el exterior.
Las residencias universitarias varían en tamaño, precios e instalaciones. Dependiendo de la residencia estudiantil, podés compartir una habitación o un pequeño departamento, generalmente ubicado cerca de escuelas, campus y edificios universitarios. Sin embargo, los lugares en las residencias para estudiantes pueden ser limitados. La mayoría incluso están ocupadas semanas antes de empezar el ciclo académico. Recorda enviar tu solicitud con tiempo, algunas de ellas tienen su propio sitio web para registrarte.
Si sos del tipo de persona llevadera y aventurera, a quien no le importa compartir una habitación con alguien que probablemente no conocés, ¡una residencia universitaria es el lugar ideal para vos! ¿Quién sabe? Tu compañero de habitación quizás podría ser tu nuevo mejor amigo.
3. Intercambio cultural con una familia anfitriona
Aprendiendo el idioma, sumergiéndote en la cultura de tu nuevo país y saboreando la comida local, ¿así te imaginás estudiando en el exterior? Entonces un intercambio cultural en casa de una familia anfitriona es la opción que buscás.
Muchas de estas alternativas están disponible a través de una agencia privada como Au Pair o Work and Travel. Aunque hay muchas ventajas de vivir con una familia anfitriona, muchos requieren que trabajes para ellos. Pero, si lo que buscás es una experiencia intercultural y a la misma vez ganar dinero, ésta es una buena opción.
4. Alquila un cuarto
Si lo que querés es vivir en un entorno familiar, sin la necesidad de tener mucho compromiso con tu familia anfitriona, podés considerar alquilar una habitación en una casa privada. Este tipo de alojamiento puede costarte un poco más pero, te vas a sentir como en casa mientras estudias en el exterior.
5. Departamento privado
Privacidad, independencia, comodidad y tu propio lugar para estudiar. Un departamento privado puede ofrecerte todo eso. Encontrar el apartamento perfecto requiere tiempo y el presupuesto adecuado. Muchos grupos de redes sociales y sitios web de la universidad pueden ofrecerte la información necesaria sobre apartamentos para estudiantes. ¡Cuidado!, tené precaución con los listados falsos y evitá las estafas leyendo detalladamente cualquier oferta de renta. También asegurate de visitar el alojamiento antes de firmar cualquier contrato.
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