Todos queremos ayudar a las personas que más lo necesitan. Pero, con tantas organizaciones benéficas, puede ser difícil saber si tu donación va a llegar al lugar indicado. Debes tener en cuenta que hay ONG falsas y estafadores que se hacen pasar por trabajadores sociales o propietarios de organizaciones benéficas.
Con el aumento de los desastres naturales, estamos rodeados de fondos de ayuda a las víctimas y de historias muy tristes sobre distintas causas humanitarias. Sin embargo, ayudar a los demás no debería implicar que nos engañen. Por eso debemos aprender a detectar aquellas recaudaciones de fondos que son fraudulentas.
Evitemos que los estafadores se aprovechen de nuestra buena voluntad identificándolos con suficiente antelación. A continuación, se enumeran algunas señales de alerta comunes de las estafas relacionadas con organizaciones benéficas:
- Presión: Recibes una llamada inesperada en la que te insisten para que envíes una donación inmediatamente. Puede que te pidan que transfieras dinero a través de un servicio de transferencia de dinero como Western Union. Las ONG legítimas te permitirán donar cuando y como quieras.
- Artimañas: Recibes un mensaje de agradecimiento de una organización benéfica incluso si no has hecho ninguna donación. En su intento de llamar tu atención, harán afirmaciones falsas y vagas. Siempre habrá un elemento emocional en estos intentos de engaño.
- Justificante de donación: Las organizaciones sin ánimo de lucro deben emitir recibos de las donaciones, por lo que debe sospechar si no te ofrecen un recibo o le faltan los datos adecuados, como el nombre de la organización.
- Rentabilidad garantizada: Las asociaciones benéficas tratan de ayudar a los demás, no de enriquecerte. Si alguien asegura que recibirás ganancias disparatadas con tu donación, es definitivamente una estafa.
Veamos ahora cómo prevenir este tipo de fraude. Aquí tienes algunos consejos para derrotar a los estafadores en su propio juego:
Haz los deberes e infórmate bien:
- Dona solo a organizaciones reconocidas y evita caer en las trampas de aquellas con nombres muy similares.
- No proporciones datos personales, como tu número de cuenta bancaria. Utiliza un cheque o una tarjeta de crédito para mayor seguridad (y para facilitar las devoluciones de dinero si algo sale mal).
- Solicita siempre licencias, registros y documentos de verificación similares.
- Infórmate antes de abrir la cartera. Comprueba el sitio web, el número de teléfono y la dirección postal. Lee reseñas en internet y habla con amigos y familiares antes de donar dinero. Pregúntales sobre cómo se empleará el dinero y cuánto dinero se destina realmente a la causa en lugar de al departamento de administración de la organización benéfica en cuestión.
- Al pagar en línea, asegúrate de que el sitio web es seguro. Identifica la palabra “https/” al inicio del enlace. Si no tiene la “s”, puede que la página no sea segura. No abras enlaces de pago ni archivos adjuntos aleatorios, aunque parezcan familiares.
Recuerda que investigar un poco ayuda mucho. Aléjate de las estafas benéficas y asegúrate de que tu generosidad de verdad marque la diferencia.
Para obtener más información sobre otros tipos de fraude y cómo denunciarlo, visita nuestra página de Concienciación sobre el fraude.