Por Juan Alvarado, empleado de Western Union
En Western Union, nuestra consigna es "move money for better". El servicio que proporcionamos ayuda a familias y personas de todo el mundo a salir adelante o, incluso, a cumplir sus sueños. Sin embargo, cada individuo es diferente y cada circunstancia es distinta. Por este motivo, es importante saber qué hacer con el dinero que recibe.
Una de estas situaciones le puede resultar familiar. Imagine que es una persona joven que está en el extranjero, puede que estudiando o viajando. Quizá vaya a visitar a un amigo o un familiar que está lejos. Pero todos necesitamos dinero, ¿verdad? Sin embargo, ¿qué es lo mejor que puede hacer con el dinero que obtiene? Estos son algunos consejos útiles para tener un buen comienzo:
Utilice la regla 80/20:
Intente ahorrar el 20 % del dinero que recibe y utilice el 80 % restante en todo lo demás. Es un método simple y beneficioso. Descubra cómo elaborar presupuestos y piense de qué manera va a utilizar el efectivo de cada día, semana o mes. No hay mejor sensación que la de saber que uno tiene dinero ahorrado cuando más lo necesita.
Configure una cuenta de emergencia:
¿Es consciente de que está reservando un 20 % de su dinero? Hágalo de forma oficial y transfiéralo a una cuenta creada para tal fin. Sepárelo de su cuenta principal. De este modo, no lo utilizará de forma accidental a menos que se trate de una emergencia. Piense que es parecido a la sensación de encontrar un billete de 20 USD en unos vaqueros viejos.
Tenga cuidado con el dinero en efectivo:
Es normal que sucedan cosas negativas, pero a veces se pueden evitar si se toman medidas preventivas. Le voy a contar mi propia experiencia en el tren de Madrid. En mi país, nunca he perdido nada ni nadie me ha robado, por lo que siempre he pensado que era buena idea llevar TODO mi dinero en la cartera. En resumen, salí de la última estación sin cartera y sin dinero en el banco.
Propóngase metas financieras a medio o largo plazo:
Esto también sirve como consejo para la vida; intente alejarse del presente y piense un poco en el futuro. La mejor manera de hacerlo es proponerse una meta financiera, tanto a medio como a largo plazo. ¿Quiere una nueva televisión? Añádala al 20 % del que hablábamos antes. Otro 10 % que va directo a ese objetivo. ¿Cuánto tiempo tardará? Esto depende exclusivamente de usted, de cuánto dinero puede ahorrar y durante cuánto tiempo.
Según mi experiencia, no existe mejor manera de usar el dinero que teniéndolo en cuenta como si fuera una empresa. ¿Qué es lo que necesito de verdad? ¿Qué quiero conseguir con mi trabajo? ¿Gasto más dinero del que necesito? ¿Qué pasa si tengo algún problema? Es muy importante contestar estas y otras preguntas.
Usar el dinero con prudencia depende exclusivamente de usted, el destinatario. Es una responsabilidad personal, motivo por el cual es recomendable que sepa qué debe hacer con los ingresos que recibe. Sigamos nuestra consigna: moving money for better